CINE. CIAO BAMBINA. ENTREVISTA CON AFIOCO GNECCO
Por Alexandra Iglesias, jefa del departamento de cinematografía
Hoy en Fantú, Alexandra, jefa del departamento cinematográfico, ha tenido el placer de entrevistarse con Afioco Gnecco, co-director, co-guionista y protagonista del cortometraje documental “Ciao Bambina”, nominado a los premios Goya en su categoría. En este proyecto, Aficio y Carolina nos invitan a acompañar la transición de género de este primero y la conversación sucedió tal que así…
ALEX – Afioco, primero de todo gracias por tu tiempo y enhorabuena tanto por la nominación como por la valentía para sacar adelante este proyecto tan profundamente personal. De hecho, lo primero que quisiera descubrir es saber cómo has gestionado levantar una pieza audiovisual que va sobre tí mismo. Supongo que verte a ti mismo en pantalla constantemente debe hacerte sentir muy desnudo y expuesto, siendo un tema tan personal. Más aún al ser un documental, donde no existe la barrera que tiene naturalmente la ficción. Aquí la narrativa, el hilo conductor y la base del proyecto eres literalmente tú mismo. ¿Cómo te has enfrentado a eso?
AFIOCO – Con mucha terapia (ríe). La verdad es que verme a mí mismo es algo que aún no termino de llevar bien. Yo a los pases ya no me quedo… Aunque sobre todo cuando más sufro es en montaje. Lo paso fatal…
ALEX – Siento que debe ser natural en tu caso, ya que al final el proyecto va sobre la identidad, cuyas bases son cómo te ves y cómo te ven. Entonces tú la relación con la imagen entiendo que es algo complicada.
AFIOCO- Sí lo es. Yo en concreto y muchas personas trans, sentimos bastante amor-odio hacia nuestro cuerpo, entonces verte tanto es muy duro. Pero bueno, gracias a mucha terapia y a la paciencia de Carolina y Ana (montadora del cortometraje) logro sobrellevarlo mejor.
ALEX – ¿Y cómo nace este proyecto? ¿Cuál fue el proceso creativo?
AFIOCO – Yo soy realizador y director, y además siempre estoy grabando a Carolina.
ALEX – Un documentalista nato veo.
AFIOCO – Sí, sí. Entonces, el verano antes de mi primera cita con el endocrino, nos hicimos un viaje al Hierro los dos para prepararnos, ya que sabíamos que se venía un proceso muy intenso para mí. El día antes de coger el avión pensé que me gustaría grabar el proceso con Carolina, y a partir de ahí no paramos de grabar.
Yo ya había hecho bastantes documentales y cortos sobre el tema trans, y era lo que a mi me salía contar. Además llevo muchos años colaborando con la ONG Apoyo Positivo. Ahí es donde está mi compromiso con el audiovisual, el cual pretendo que sea reivindicativo y disidente. Así que con Apoyo Positivo nos presentamos a las ayudas de la creación del Festival de Málaga, y nos la concedieron. Luego apareció Potenza, el productor, que fue además quien nos propuso hacer la peli y a partir de ahí empezamos a darle más forma al proyecto.
Cuando rodamos el corto ya sabíamos que íbamos a hacer la película, así que lo hicimos también para ver cómo funcionábamos Carolina y yo trabajando juntos. Carolina no había dirigido nunca, así que sirvió para probarnos, aprender y conocernos laboralmente con Carolina.
ALEX – De hecho, codirigir una película me parece un reto gigante. ¿Cómo ha sido vuestro proceso?
AFIOCO – Lo cierto es que Carolina, al ser actriz, lleva muy bien la parte emocional. En mi caso, mi fuerte es la parte visual y de cámara, entonces hemos aprendido el uno del otro y nos hemos complementado muy bien. Además Carolina en todo momento me ha cuidado muchísimo. Por ejemplo en la escena de la playa, por guion yo tenía que bañarme en el mar, pero justo antes de rodar esa secuencia yo empecé a tener un ataque de ansiedad. Entonces Carolina me dijo “No tienes que bañarte si no te quieres bañar, haz lo que te salga. Pero si lo haces que sea de verdad, que sea porque lo puedes hacer”
ALEX – Personalmente, siento que eso es lo bonito de ese final. Es super humano y se respira verdad.
AFIOCO – De hecho nuestro pacto en todo momento era que no se dejaba de grabar y que pasara lo que pasara tenía que ser de verdad. A mí me está ayudando mucho como cineasta aprender esto, porque yo vengo de hacer mucha publicidad, que es pura estética. Ahora estoy haciendo un acto de deconstruirme en ese aspecto.
ALEX – Yo tuve un profesor de montaje muy inspirador (Joan Marimón) que decía “cuando hay que decidir qué montar, la prioridad siempre es la emoción”.
De hecho mi escena favorita es la del pequeño funeral. ¿Esto cómo se os ocurre? ¿Cómo te enfrentas tú a rodar esto? No parece fácil…
AFIOCO – Yo antes le tenía mucha manía a Rafaela, y me metía mucho con mi yo pasado, pero Carolina me decía “No te consiento que le hables así a mi amiga” (…) “deja de meterte con esa persona, al final esa persona eres tú”. Entonces yo quise buscar esa reconciliación y hacerle un homenaje a Rafaela, así que buscamos la manera para que yo hiciera las paces con ella y se nos ocurrió esta escena.
Carolina me pidió que escribiera una carta, y sobre todo que ella no quería leerla. Y yo estaba muy inseguro y quería que la leyera antes de rodar, necesitaba saber si estaba bien… Pero ella me insistió “Es TU carta, escribas lo que escribas estará bien”.
Rodando me costó mucho leerla. Me daba mucha vergüenza porque me estaba abriendo en canal. Desde que dieron la acción hasta que empecé a leer pasaron cinco minutos donde estuve callado porque no me atrevía. Pero la verdad es que en cuanto empecé a leerla fue muy liberador y lo que pasó allí pasó de verdad, no hay ningún artificio. Es una toma y nunca se repitió.
ALEX – Me parece super bonito que ocurriese así, porque dijeras lo que dijeras, era tuyo y salía de tí. Admiro esa decisión de Carolina, porque se que cuando diriges, no tener el control sobre lo que va a ocurrir puede generar mucha inseguridad. Pero también una aprende que a veces la magia está en lo espontáneo y la falta de control.
Por otro lado, si te sientes cómodo, querría indagar un poco más en tu proceso personal, sobre todo porque he vivido casos cercanos pero siempre de personas mucho más jóvenes, que transicionan de género durante la infancia o la adolescencia.
AFIOCO – Primero de todo, creo que el malestar de género es común, independientemente de la edad, tanto si tienes 5 años como 40. Realmente nunca paras de reconstruirte y aunque siento que yo puedo tener más herramientas por mi edad y madurez, la inseguridad y los miedos son los mismos. Yo el primer año de hormonas me sentía como un niño pequeño.
Aunque por otro lado, los niños de hoy en día tienen más herramientas que las personas de mi generación, ya que yo por lo menos vengo de un entorno de educación muy cerrada; mi familia era super religiosa, conservadora y machista. Al venir de algo tan castrante, me ha costado mucho más salir de ahí. Quiero creer que ahora un niño de 5 años que sus padres lo educan en una libertad y un aperturismo total puede tener muchas más herramientas de las que tenía yo cuando empecé con mi transición casi a los 38 años.
Analizando mi infancia y adolescencia, me dí cuenta de que esto venía de largo. Anécdota: yo en el cole, cuando me enteraba de que alguien tenía piojos me iba corriendo a que me los pegara porque era mi manera de conseguir que me cortaran el pelo. Pero me fui dando cuenta con la edad y mucho más tarde. Además, hace 40 años, un hombre trans, era algo impensable.
ALEX – Siento que el cine se ha convertido en un espacio seguro para poder contar todo esto. Además hoy en día parece que lo queer está en primera plana de lo audiovisual ¿Tú también lo sientes así?
AFIOCO – Ojalá hubiese más cineastas Queer la verdad. Creo que no somos muchos, pero creo que los pocos que somos hacemos mucho ruido, ya que no nos queda más remedio. Estuve de mentor en el Queer Lab y la mayoría eran proyectos de personas trans. Yo lloraba de emoción. No tenían complejos, estaban deconstruídos.. daba gusto.
Yo todavía estoy intentando salir del binarismo que yo personalmente necesito para tener paz mental. Necesito que me lean como un chico y verme chico. Pero en realidad es una tontería. Así que ver que hay gente que ha podido romper los esquemas de género me parece una fantasía. Creo que es el futuro. Y el futuro de los cineastas.
ALEX – Totalmente, las nuevas masculinidades, nuevas feminidades, que se rompan todos los constructos y que las personas se puedan expresar de manera completamente libre.
AFIOCO – Ojalá lleguemos ahí. De hecho ya estamos llegando y creo que es una forma de ser más libres todos y tener más paz mental.
Para seguir avanzando creo que es vital que nuestras narrativas las empecemos a contar nosotros mismos. Está muy bien que se hagan películas como “20,000 especies de abejas”, “La mitad de Ana” o “Emilia Pérez”, si se hacen desde el amor y desde el respeto me parece maravilloso. Pero, al mismo tiempo, ya está bien de la apropiación de nuestras narrativas. Es hora de que nuestras historias las contemos nosotros, porque creo que la particularidad y lo específico, las harían mucho más ricas.
ALEX – También que a nivel narrativo, la narrativa no solo esté centrada en la identidad, y el proceso de transicionar, ¿no?
AFIOCO – Exacto, a nosotros también nos pasan otras cosas. Nos enamoramos, nos dejan, no podemos pagar el alquiler, se nos mueren los padres… nos pasan las mismas cosas que a todo el resto. Es cierto que en el documental me he centrado en eso porque es algo que necesitaba contar, y al final se ha dado, pero creo que ya tenemos que pasar la narrativa de “pobrecito trans, no me quiero, nadie me quiere”.
ALEX – Aunque creo que esta narrativa ha sido necesaria y lo sigue siendo, pero es cierto que necesitamos avanzar, para también normalizar a la comunidad LGTBIQ+ y naturalizar integrarla en todo tipo de narrativas.
AFIOCO – Si hay directores y guionistas del colectivo, estas narrativas van a cambiar seguro. Cuando lo contemos nosotros. Porque va a ser otra mirada.
ALEX – Por ahora tú nos has regalado la tuya y de hecho estás entrando por la puerta grande con esta nominación a los Premios Goya. ¿Cómo lo has recibido?
AFIOCO – Realmente es mi octavo corto y es mi primera nominación. Así que es increíble.
Ha sido una gran sorpresa la verdad. A mí me han escrito académicos dándome las gracias que es algo que verdaderamente no esperaba. La gente lo empezó a comentar ya en el pase del Festival de Málaga el año pasado, pero yo lo veía muy prematuro.
Estrenar allí fue muy fuerte, porque acabó el pase y la ovación fue increíble. Había muchos hombres cis llorando, señoros, que venían y te abrazaban con frases como “Vamos machote, ¡tú te vas a poder bañar!”, todo muy testosterónico.
ALEX – Bueno, es un público al que no imaginabas emocionar.
AFIOCO – Eso hizo el pase importante porque nunca imaginamos que el corto le generaría esta reacción a este público en concreto. Creo que eso ha ayudado también a la nominación.
ALEX – Lo cierto es que es muy positivo ver un cortometraje como el vuestro nominado a los Premios Goya. Da mucha esperanza, mucha luz. Por esto mismo mencionaba antes al cine como una herramienta comunicativa muy poderosa. Porque estas personas es probable que en su día a día no se interesen por escuchar las historias del colectivo, ni observar o entenderlo.
AFIOCO – Por eso está muy bien estar en circuitos LGTBIQ+, pero las historias tienen que llegar a los festivales normativos, como cuando estuvimos en el festival de Alicante o en Cuenca, para que justo en lugares donde no abundan estas historias, les lleguen.
ALEX – Es que allí es donde son más necesarias. Es la gente que más lo necesita escuchar.
AFIOCO – Exacto. Es allí donde hay que hacer la pedagogía. Son personas que viven mi corto como lo más cercano a una persona trans que ha tenido, y no es que sean tránsfobos, sino porque son ignorantes y no tienen a nadie del colectivo cerca. La verdad es que he sentido que les hemos hecho cambiar gracias a que conectaron con mi vulnerabilidad.
ALEX – Es lo más bonito de la distribución, ver cómo le llega tu pieza al público. Al final hacemos cine para que nuestras historias lleguen a muchos y muy diversos rincones.
AFIOCO – Ahora no hay día que no me lleguen mensajes de agradecimiento, te lo juro.
ALEX – Qué bonito. Solo por estos gestos, vale la pena todo el proceso y el esfuerzo.
AFIOCO – Además está sirviendo de abrazo al propio colectivo, y me están agradeciendo que haya alguien representándonos. Estamos creando comunidad de cara a la película y eso da mucha energía.
ALEX – Mucha suerte entonces con el proceso que os queda por delante con el largometraje, y mucha suerte Afioco en los Goya; aunque por lo que cuentas ya has dejado una preciosa huella, y eso ya es una victoria gigante. Así que enhorabuena y muchas gracias por tu tiempo.
AFIOCO – Gracias a ti.
Editor in chief: Jo García Garrido @jogarciagarrido
Final words: Alexandra Iglesias @alexandra_iglesias_